Prometen un cambio radical en la forma en que se maneja, comparte y usa la tecnología, además se involucra a diferentes actores en su iniciativa para amplificar su alcance, como a bancos, comercios, consumidores y comunidades.
El creciente interés en América Latina llega en un momento en el que la mayoría de los países de la región están viendo cambios en la regulación de las criptomonedas y un creciente interés por parte de la población en adoptar criptoactivos, así lo asegura Sherlock Communications.
Si bien, el futuro prometedor de blockchain y la Web3 en la región tiene un largo camino por recorrer debido a las barreras ligadas a la desconfianza de la población para acceder a esta tecnología, no sé puede negar la realidad, el desarrollo de la Web3 está revolucionando la economía y atrayendo nuevas inversiones. Y Latinoamérica podría ser un buen impulso.
En Brasil, por ejemplo, alrededor del 91 por ciento de los brasileños que compran criptomonedas lo han hecho en menos de 12 meses. En Colombia, el segundo país criptográfico más grande de América Latina, la compra de criptodivisas a aumentado un 208 por ciento.
Por otro lado, en Perú, la velocidad de la tasa de adopción es aún más rápida que en otras partes de Latinoamérica es casi de mil 100 por ciento. Otros dos mercados de rápido crecimiento son México, que se espera que experimente un aumento del 345 por ciento en la adopción, y Argentina, con un aumento del 235 por ciento. Mientras tanto, Chile puede esperar un aumento del 208 por ciento.
La tierra del descubrimiento es la que más crece, ¿por qué?
“Latinoamérica es una de las regiones del planeta que más ha entendido la premisa de Satoshi y otros notables que lo siguieron en sus pasos, como Vitalik Buterin, el creador de Ethereum”, opinó Rodolfo Andragnes, presidente de la ONG Bitcoin Argentina y responsable de la Labitconf.
Pero, ¿por qué es que Latinoamérica lo ha entendido? En los últimos años se han intensificado la digitalización de la economía en América Latina, integrando a gran parte de la población a los sistemas financieros, especialmente en la criptoeconomía, a pesar de la necesidad de enseñar a las personas entender el ecosistema como tal.
Y es que, el ecosistema latinoamericano está evolucionando y madurando, implementando regulaciones amigables para proyectos Web3 y brindando espacio para la educación, el desarrollo de nuevos talentos y la adopción de soluciones basadas en blockchain. Es decir, Latinoamérica se le ha encontrado el uso y aplicación a las criptomonedas como Bitcoin, Finanzas Descentralizadas (DeFi), tokens no fungibles (NFTs) y juegos Play2Earn (P2E).
Todo esto porque ofrece soluciones a problemas serios y reales que enfrenta la población: inflación, degradación ambiental, emergencia climática, social desigualdad y exclusión de miles de personas del sistema financiero.
