Primero era comida para los difuntos, luego fue dinero o fruta ahora dulces. De seguir como iba la tradición ¿qué hubiera convenido actualmente?
Actualmente, los niños en muchos países se disfrazan y salen a pedir dulces el 31 de octubre. Esta costumbre se conoce como trick-or-treating, dulce o truco en español. Sin embargo en el caso de México, la tradición tiene un origen diferente.
La tradición de “pedir calaverita” en México conforme a los años ha ido cambiando, no sólo en el sentido de que las nuevas generaciones parece ser que han resignificado y adoptado la entrada del famoso “Halloween” sino también para el bolsillo de aquellos que año con año deciden, llenar las calaveras de miles de niños o jóvenes.
¿Cuál es el origen de ‘pedir la calaverita’?
Hace mucho tiempo, cuando todavía existían los grandes hacendados rurales y se acercaba la fecha del 2 de noviembre para ir a visitar a los difuntos, los trabajadores, pedían permiso a sus patrones para ausentarse todo el día e ir a los cementerios.
Como una especie de ayuda, los hacendados les regalaban comida o algo de dinero para que fueran al cementerio y pudieran ofrendar algo a sus parientes, de ahí se convirtió en una costumbre, de tal modo que cada 2 de noviembre, los trabajadores iban a pedir su calaverita.
Nombrada así porque en general los alfeñiques; es decir, aquellos dulces hechos y moldeados con azúcar, los cuales se solían regalar a los seres queridos eran los que los niños corrían a pedir de casa en casa.
Una tradición que sale más cara pero económica a la vez
Ya falta menos para el día de Muertos y miles de niños, jóvenes y hasta adultos se preparan para “pedir calaverita”. Disfraces, concursos, presentaciones y dulces llenarán las calles de diversas partes de México. Pero, conforme los años, las casas que antes todo el tiempo daban una paleta, han dejado de hacerlo. ¿Cuál es la razón? Los dulces suben sus precios.
En la película la Leyenda de la Llorona, Kika y Beto salen a pedir dulces, pero en lugar de eso les dan tejocote, Kika se queja “porque no es piñata” y les dice “codos”. ¿Suena familiar? Así es, actualmente los niños van por las casas gritando “me da mi calaverita por favor” sin embargo esta tradición a pesar de que desde hace año se daban los dulce de azúcar con el tiempo ha tenido diferencias.
Justo como se muestra en la película, los mexicanos han optado por dar la calaverita según sea conveniente, “comida, pan de muerto, fruta, un peso o dulces”. Proliferando los dulces, pero ¿esto sigue siendo conveniente?
Según la BBC, la inflación esta teniendo un impacto en las golosinas, incluso en la producción de las frituras de hasta un 35 por ciento —en los económicos— y 14 por ciento —en los costosos o de mejor marca—. por ejemplo, en el 2000 10 pesos eran una “fortuna” para los niños, quienes podían comprar hasta 16 dulces con dicha cantidad de dinero.
Es lo mismo para quienes daban dulces en estás fechas, pues podían variar el tipo de dulce que daban ya que algunos costaban en la tienda hasta 20 centavos. Ahora una bolsa con 20 paletas cuestan 35 pesos. Tal vez, por eso en algún tiempo, algunas personas preferían dar el famoso “pesito” a los niños en lugar de un dulce.
¿Entonces por qué no se regresa a dar fruta, dulces o dinero?
La inflación ha sido un golpe año con año, las cosas que hace unos 10 años podían hacer una despensa de 300 pesos, ahora hacen una de 500 o 800 pesos. Lo mismo pasa, dado que la cantidad de niños que salen a “pedir calaverita”. ¿Por qué? Se necesitan más de una bolsa de paletas.
Y ¿por qué no dinero o frutas? Los precios no sólo han incrementado en los dulces, también en la canasta básica y el peso, “ya no alcanza igual”.
Por ejemplo, una bolsa de 20 paletas cuesta 35 pesos, es decir, 20 niños visitando una casa obtienen un dulce, mientras si se da 1 peso, ellos, para juntar para una bolsa de 20 paletas les tomaría visitar 35 casas, considerando todas las casas dieran calaverita.