Gracias a que el Metaverso abre un abanico de oportunidades para los negocios y marcas, la compra, venta y comercialización de productos y servicios digitales es la meta
Ahí por el 2018 Ralph ‘el demoledor’ y Vanellope, nos presentaban el mundo del Internet, luego de que su arcade decidiera integrar el WIFI. A primera estancia, parece ser una escena normal, sin embargo, la realidad es que representa el inicio de la conexión con un mundo nuevo.
Un mundo donde convergen miles o millones de personas, interactúan entre sí, ya sea jugando, platicando, comprando, subastando, entre otras cosas. En otras palabras, se muestra una vida real dentro de un mundo digital, ¿te suena familiar?
Así es, se trata del Metaverso, este espacio virtual que simula la realidad, que no impone una distancia física, que cuenta con su propia economía y donde las marcas han intentado introducir no sólo su nombre sino también sus productos y servicios.
En otras palabras, este mundo o espacio virtual es un nuevo mercado, como las redes sociales y el ecosistema Web 2.0 lo han sido, sólo que conlleva un cambio a la forma de interactuar con la tecnología, y esta, trajo consigo la apuesta de las marcas, principalmente para vender dentro de ella.
Entonces, ¿cuál es la apuesta de las marcas en el Metaverso?
La Web 3.0 trajo consigo la evolución de todo un ecosistema tecnológico, si bien, ya existían ciertos matices, no fue hasta la llegada de nuevas herramientas que este tuvo un mayor crecimiento, sobretodo en el área del comercio.
Nuevos mercados y nuevos tipos de usuarios se presentaron y las empresas de tecnología como Microsoft, Apple y Google, incluso las marcas de moda, deportivas, musicales, inmobilarias, han posado sus ojos en ese espacio, siendo su principal preocupación saber ¿cuál será el impacto en el comercio electrónico o de sus ventas?
Las tiendas online sufrirán una transformación, aquí no bastará con mostrar el catalogo de opciones o dar los mejores precios o rebajas, sino los usuarios probarán los productos ofrecidos, es decir, visitarán las tiendas o asistirán a las salas especificas para escuchar música, comprar ropa, incluso pagaran con una moneda digital. Lo que se traduce en una fuerte inversión tecnológica.
Inversiones que irán desde nuevos diseñadores, programadores, asociaciones con plataformas en el Metaverso, creación de redes Blockchain, nuevas áreas comerciales, innovaciones de realidad virtual y aumentada (AR y VR), creación de chatbots, creación de smart constracts, producto únicos, incluso mundos virtuales nuevos que ofrezcan una interacción diferente.
Pero no sólo en el área virtual, también en la real, ya que, Metaverso significa también contar con las herramientas con la que los usuarios podrán ingresar, desde una buena red de Internet hasta gafas de realidad virtual y guantes.